La experiencia de mis pacientes
Alcance unos niveles de ansiedad insoportables por mi sobrecarga de trabajo. Me afectó al carácter, a mis relaciones con los demás y dejé de disfrutar mi día a día. Después de 3 semanas de trabajando y siguiendo las pautas de Ángel note un cambio muy positivo.
Empecé a sentir la ansiedad más fuerte cuando en un momento de mi vida había conseguido todos mis objetivos. En vez de estar feliz tenía ansiedad y en ciertos escenarios de mi vida mi veía limitada. Entendí mi ansiedad y a controlarla. Aunque sigo en terapia he dejado de ver mi ansiedad como algo malo. Empiezo a verla como algo normal y a controlarla.
Gracias a las enseñanzas de Ángel he aprendidoa aceptar mi ansiedad y a tener suficiente autonomía para afrontar las diferentes situaciones. Ahora tengo más confianza en mi misma.
Sufrí un ataque de pánico, una cosa nueva para mí. A raíz de este ataque de pánico desarrolle un episodio de ansiedad generalizada y acabe en una situación muy desagradable. Nunca había ido a un psicólogo por miedo a decir "estamos locos" pero desde el primer día encontré un apoyo muy importante. Su programa me parece adecuado. Os puedo decir que 5 meses después mis niveles de ansiedad están al mínimo.
No sabía en que iba a consistir la terapia ni en si iba a funcionar. Ahora, aunque no haya terminado, me siento muy contento porque estoy haciendo grandes progresos y Ángel me parece un gran profesional.
He descubierto facetas de mi misma y me ha ayudado a resolver mis problemas. La verdad es que su método es muy bueno, él es excelente y lo recomiendo a todo el que tenga problemas de ansiedad o de estrés. He descubierto como entender la ansiedad, tratarla y enfrentarme a ello.
Soy Álvaro y tengo ansiedad anticipatoria con síntomas de agorafobia. Durante mucho tiempo me dijeron que lo mío era ansiedad “normal”, pero gracias a Ángel entendí que lo que me afectaba de verdad era no tener una vía de escape rápida en situaciones que sentía como peligrosas.
Lo que me angustiaba no era salir a la calle, sino sentirme atrapado en una clase o en cualquier sitio donde no supiera cómo salir sin llamar la atención.
Recuerdo cuando Ángel me propuso esperar un paquete fuera de casa. Lo hice, y aunque al principio fue incómodo, luego estuve bien. Lo mismo pasó cuando empecé con las exposiciones: al principio costaba, pero sus palabras me ayudaban a seguir.
Gracias a sus pautas, he aprendido a enfrentar esos momentos, a dejar que la ansiedad fluya y a seguir adelante. Hoy estoy trabajando, me siento bien y he mejorado muchísimo. A veces cuesta escuchar lo que uno no quiere oír, pero si lo haces con alguien que sabe lo que hace, el cambio llega.
Hace tres meses pasé por un episodio muy difícil. Empecé a sentir ansiedad, estrés y pensamientos intrusivos que no sabía cómo manejar. Al principio, no entendía qué me pasaba. Tenía palpitaciones, me costaba respirar y terminé yendo a urgencias porque pensaba que era algo físico. Pero después de descartar cualquier problema médico, me dijeron que era ansiedad.
Ahí comenzó un proceso de entender lo que me estaba ocurriendo. Me di cuenta de que lo que sentía no era raro, que muchas personas lo han vivido también. Poco a poco empecé a informarme, a ir a terapia y a aprender a gestionar mis emociones. No ha sido fácil, pero ahora me siento mucho mejor y quiero que sepas que se puede salir adelante.